ANA ALFARO especial para la prensa revista@prensa.com (Viene de la 1B) El Beaujolais es un vino muy ligero, típico de la homónima región, encasillada entre las riberas de los ríos Saône y Ródano, producidos exclusivamente con la variedad Gamay. Esta uva, conocida oficialmente como Gamay Noir à Jus Blanc (Gamay negra de jugo blanco), rinde un néctar mucho más violáceo y translúcido que las otras cepas tintas, famoso en tiempos recientes por el furor del Beaujolais Nouveau, que es el primer vino de la cosecha en salir al mercado, el tercer martes de cada noviembre. Sin embargo, el ardid publicitario del Nouveau ha relegado a segundo plano al resto de sus hermanos más tradicionales.
En 1395, se prohibió plantar la Gamay en suelo borgoñés, por lo que la región de Beaujolais, al sur, la hizo suya. Hoy en día, el 98% de sus hay 55 mil acres está plantado con esta uva, lo que constituye una superficie mayor a las otras tres regiones de Borgoña, combinadas. La región en sí se divide en Bas-Beaujolais y Haut-Beaujolais, y de esta última provienen los Beaujolais-Villages (que pueden provenir de 39 villages distintas) y los Beaujolais Cru, que son vinos más finamente elaborados, como el denominador de Cru, o área designada, indica. Estas regiones suman diez y son: Brouilly,Chenas, Chiroubles, Côte de Brouilly, Fleurie, Juliènas, Moulin-à-Vent, Morgon, Régnié, Saint-Amour. El Beaujolais se debe tomar dentro de los siguientes dos o tres años; sin embargo, los mejores Crus elaborados con estilos más tradicionales pueden durar hasta diez años, si vienen de una buena cosecha. En cualquier caso, es necesario recordar que este es un vinito ligero, sin complicaciones, con aromas exquisitos pero volátiles y con posgusto corto. Sin embargo, son absolutamente perfectos para el pescado y mariscos, y sugiero servirlos fríos, como un blanco.
Sugerencias Probamos alrededor de ocho chef Pascal Finet, que además de su pasaporte gálico, es gran aficionado a la pesca. A continuación nuestras impresiones.
Beaujolais Villages:
.Georges Duboeuf, Beaujolais-Villages 2000 (Tastevin, $7.15). A Georges Duboeuf se le conoce como el rey del Beaujolais; su propuesta es deleitosa, con muchas flores, luego fresas y ciruelas. Excelente relación costo-calidad.
.Joseph Drouhin, Beaujolais-Villages 2001 (Brostella, $8.95). El que más me gustó de todos los Villages, tiene un riquísimo primer aroma de violetas, luego frutas silvestres y cerezas, refrescante y exquisito.
.Barton & Guestier, Beaujolais-Villages 2000 (Motta, $10.30): Frutas frescas y malvaviscos, sabroso y equilibrado.
Beaujolais Crus:
.Louis Jadot, Chateau-de-Jacques, Moulin-a-Vent, 2001 (Motta, $18.00). Jadot solamente produce vinos con denominación de origen; este Cru fue el favorito de Finet, con su expresivo bouquet de fresas, luego un poco de madera, apenas, y un trasfondo de pimienta en boca. Probablemente con un atún tartare, dijo el chef aficionado a la pesca.
.Louis Jadot, Domaine de Monnet, Brouilly 2001 (Motta, $16.60). Este otro Cru es súper ligero, con aromas florales, violeta, algo de rosas y flores silvestres; sigue la inevitable fresa y mora. Con deditos de corvina apanada, o hasta con tempura.
