Vianey Castrellón vcastrellon@prensa.com En medio de un ambiente ecológico, las 71 delegadas de Miss Universo cumplieron ayer con su segundo compromiso privado, asistiendo a la gala de otro de los patrocinadores locales del concurso, la compañía distribuidora de automóviles japoneses Ricardo Pérez.
A las ocho de la noche, la actual Miss Universo, Justin Pasek Patiño, hizo su entrada al salón Bella Vista del Hotel El Panamá, engalanada en un vestido negro con un pronunciado escote.
Posteriormente, cada una de las reinas de belleza ingresó al salón, portando una pequeña bandera de su país de origen. Las más vitoreadas por los presentes fueron las representantes de Colombia, Diana Montilla; República Dominicana, Amelia Vega; España, Eva González; Panamá, Stefanie De Roux; y Japón, Miyako Miyazaki.
En su entrada, se pudo observar que la candidata española tenía dificultades para caminar, al cojear de uno de sus pies. Este hecho pudo estar relacionado con los rumores de que la sevillana había tenido en la tarde de ayer una confrontación con su compañera de cuarto, Miss Colombia, Diana Montilla, quien se habría disgustado porque la española fuma demasiado.
La gala ofrecida por la compañía Ricardo Pérez conmemoraba el Día Internacional del Medio Ambiente, por lo que cada una de las delegadas plantó su bandera y una "semilla de la amistad" en pequeñas macetas ubicadas en las mesas del salón.
Estas semillas serán posteriormente sembradas en el Museo de la Biodiversidad Frank Ghery, cuya construcción en Amador se inició recientemente.
Los padres de la representante de Panamá, Stefanie De Roux, estuvieron presentes en la gala. La madre de la reina panameña, evidentemente emocionada, aplaudió efusivamente cuando su hija hizo su entrada al salón y una vez las delegadas estuvieron ubicadas en el escenario, intercambiaron besos a la distancia.
La prensa, que fue ubicada en la parte superior del salón, tuvo una cobertura restringida del evento y se le impidió las entrevistas a las delegadas. Eso no imposibilitó que, desde lo alto, los periodistas locales vitorearan a sus favoritas, Miss Colombia y Miss Panamá, y tratarán de hacerles preguntas.
Luego de su presentación, las delegadas fueron escoltadas hasta las mesas, donde acompañaron a los presentes, que aprovecharon para tomarse fotos con ellas antes de la cena.
