La selección alemana del entrenador Joachim Loew sufrió ayer su primera derrota, por la mínima diferencia, en un amistoso contra el combinado de Dinamarca disputado en Duisburgo.
"Queríamos dar una oportunidad a los jugadores jóvenes", se justificó Loew. "Hemos ganado muchos conocimientos y conocido mejor a los jugadores. El equipo lo dio todo, pero los daneses estuvieron más metidos en el juego", agregó.
Loew se convirtió ayer en el primer entrenador alemán que introduce a seis novatos en un mismo partido de selección, entre los que destacó el portero Robert Enke con varias paradas espectaculares antes del gol de Nicklas Bendtner, a nueve minutos del final.
El equipo que presentaba Alemania hacía esperar que hubiera nerviosismo y así fue. Sobre todo los dos centrales, Manuel Friedrich y Alexander Madlung, tuvieron muchos problemas.
Dinamarca empezó a tener posibilidades a poco de haber comenzado el partido.
