Ai Weiwei, artista chino que concibió el nuevo estadio olímpico de Beijing junto a un equipo de arquitectos suizos, afirma que no quiere saber nada de la propaganda para la que las autoridades de su país utilizarán ese espectacular recinto durante los Juegos del próximo año.
En declaraciones al diario británico The Guardian, Ai, que ideó el extraño diseño del estadio, una especie de entramado de acero, junto a los famosos arquitectos suizos Herzog & de Meuron, asegura que no asistirá a la ceremonia de apertura, dentro de un año, ni quiere que se le asocie con el Gobierno o los Juegos.
"Me disgustan profundamente todas las emociones que se suscitan con la propaganda. Es apartarse de los hechos e inventarse algo para engañar a la gente e impedir todo debate auténtico. No es bueno para nadie", critica el destacado artista chino.
Ai acusa a los encargados de coreografiar la ceremonia inaugural del 8 de agosto de 2008, incluidos los cineastas Steven Spielberg y Zhang Yimou, de no estar a la altura de su responsabilidad como artistas.

