Kenenisa Bekele, el atleta etíope que intento ayer, sábado, batir el récord del mundo de 3 mil metros bajo techo en la Reunión Internacional de Valencia, se quedó finalmente a más de 11 segundos (7:36.08) del registro que consiguió el keniata Daniel Komen en 1998 (7:24.90).
Bekele mantuvo un buen ritmo guiado por varias "liebres" hasta el paso por los 2 mil metros (5:02.26) y finalizó la prueba con una gran potencia, aunque finalmente no pudo batir el récord del mundo.
El registro logrado ayer por el etíope se queda además a seis segundos de su mejor marca y lejos también del mejor tiempo este año, en manos de su hermano menor Tariku Bekele (7:31.09 el pasado 2 de febrero en Sttugart, Alemania).
Tampoco pudo alcanzar el récord del mundo de esta misma distancia su compatriota Meselech Melkamu (8:29.48), ya que se quedó a algo más de cinco segundos del registro de la también etíope Meseret Defar (8:23.72, conseguido en Sttutgart, Alemania, el 3 de febrero del año pasado).
Soboleva estuvo cerca
Mientras tanto en Moscú, Yelena Soboleva se convirtió en una de las grandes protagonistas de la segunda jornada de los campeonatos de atletismo en pista cubierta de Rusia, al conseguir una nueva plusmarca nacional y quedarse muy cerca del récord mundial de los 800 metros.
Soboleva corrió la distancia en 1:56.48, por lo que se quedó a 67 centésimas del récord universal que ostenta, desde el 3 de marzo de 2002, la eslovena Jolanda Ceplak, y ahora se coloca en la cuarta posición de la tabla de la historia.
Tras ella, otras tres atletas consiguieron bajar de los dos minutos: Natalya Ignatova (1:58.84), Marya Savinova (1:59.71) y Marya Shapaeva (1:59.71).
La ex campeona mundial de 200 metros, Anastasiya Kapachinskaya, consiguió la mejor marca universal de la temporada con 23.02, lo mismo que logró Olesya Zykova en los 400 (51.09).
Yelena Slesarenko, campeona olímpica de altura, se quedó a las puertas de superar los 2.05 metros, por lo que se tuvo que conformar con ganar el oro con 2.01 metros.

