Un partido fue suficiente para dejar en claro que a la maquinaria de Brasil no la frena la altura en el hexagonal final del Sudamericano juvenil.
Mucho se habló antes del choque entre Brasil y Chile, disputado el lunes, de que la verdeamarela llegaba en desventaja a una sede donde no disputó la fase preliminar y que está a 2 mil 300 metros sobre el nivel del mar.
Tras un apretado primer tiempo, que terminó empatado 1-1, Brasil sacó toda su artillería en el complemento y terminó aplastando a la “Rojita” chilena por 5-1.
En su debut en el torneo había vapuleado a Paraguay 4-2. Ahora la verdeamarela quedó apuntándole sus cañones a su rival de la segunda fecha y al que ya le ganó 3-1 en la fase preliminar: Colombia.
Neymar marcó el primer tanto brasileño de tiro libre.
