Los problemas físicos no le dan tregua a los Cavaliers.
Matthew Dellavedova, el escolta australiano que ha sido la revelación de la postemporada, debió ser hospitalizado a primeras horas de ayer, miércoles, debido a fuertes calambres que padeció tras el tercer partido de la final de la NBA.
La noche del martes, Dellavedova anotó 20 puntos al disputar 38 minutos en la victoria de Cleveland por 96-91 ante Golden State. El triunfo dejó a los Cavs con ventaja 2-1 en la serie.
Dellavedova ha quedado como titular por el estelar Kyrie Irving, descartado en la serie tras sufrir una lesión en la rótula de la rodilla en el primer partido y recién fue dado de alta tras ser sometido a una cirugía.
Los Cavs informaron que Dellavedova recibió terapia intravenosa en la Quicken Loans Arena tras el partido y luego fue trasladado al hospital para recibir más tratamiento.
Un portavoz del equipo indicó que Dellavedova, quien subió a la ambulancia por sus propios medios, sufrió calambres en “varias partes del cuerpo”.
Se desconoce si Dellavedova seguía en el hospital ayer, miércoles.
Además, el escolta Iman Shumpert tenía previsto someterse a pruebas en el hombro izquierdo, que se lastimó en el primer cuarto del partido disputado el martes.
Como es su estilo audaz de jugar, Dellavedova recuperó varios balones sueltos en el tercer partido al lanzarse al piso. También cayó sobre una silla de la banca de Cleveland en otra jugada.
“Va a dejar hasta la piel en la cancha”, dijo LeBron James.
Los problemas físicos de Dellavedova no son algo nuevo para los Cavs, que dirimen el campeonato de la liga sin Irving y el ala-pívot Kevin Love, los dos principales escuderos de James. La serie continúa hoy, jueves.

