BUENOS AIRES (AP). Cienciano de Perú logró ayer miércoles un empate valioso como visitante 3-3 ante River Plate por el encuentro de ida de la final de la Copa Sudamericana.
El defensor Giuliano Portilla, a los 26 y 79 minutos, y Germán Carty, a los 66, anotaron para el conjunto peruano.
El delantero Maximiliano López, a los 27 y 50 minutos, y el chileno Marcelo Salas, a los 84, convirtieron para River, que había ganado los ocho últimos partidos internacionales que disputó en su estadio Monumental.
El encuentro de vuelta se disputará el próximo miércoles en Perú.
Cienciano, primer equipo de provincia en la historia del fútbol peruano que se clasifica para una final de un torneo organizado por la Conmebol, apostó por no retrasarse en el campo de juego para evitar los embates del rival en los primeros minutos.
La fórmula funcionó y hasta logró la sorpresiva ventaja cuando en un tiro de esquina, Santiago Acasiete metió un cabezazo que pegó en el palo y el rebote quedó servido para Portilla.
Pero la alegría de unos 2,000 hinchas peruanos que asistieron al estadio Monumental duró apenas un minuto. River, que hasta ese momento no había inquietado en el área rival, alcanzó la igualdad con un zurdazo cruzado de López, tras ser habilitado por el colombiano Kilian Virviescas.
El conjunto millonario, que no jugaba una final internacional desde hacía seis años, dio vuelta el partido apenas iniciado el complemento cuando Eduardo Coudet desbordó por derecha y lanzó un centro preciso para que López otra vez empujara el balón a la red.
Parecía que el local se encaminaba hacia la goleada, sobre todo con el ingreso del delantero chileno Marcelo Salas, que no jugaba desde principios de octubre tras sufrir la cuarta lesión en seis meses.
Pero el Cienciano, que pese a la desventaja no perdió el orden, sacó un as de su manga: centro preciso de Miguel Llanos para que Carty anotara el empate de cabeza.
Y los peruanos estuvieron cerca de la gloria cuando Portilla volvió a dejar su sello en la red al conectar un tiro libre al área de Paolo Maldonado.
Pero apareció el Matador'' Salas, que recibió el balón y ante la salida de Oscar Ibáñez marcó el empate definitivo.
