El presidente del Comité Internacional Paralímpico, Phil Craven, fue el encargado de pronunciar las palabras de clausura de los Juegos de verano para atletas con discapacidades, ante 60 mil espectadores reunidos en el estadio Olímpico ateniense.
El dirigente canadiense agradeció al pueblo griego por ‘incluir en su corazón los deportes para discapacitados’.
Con un total de 850 mil boletos vendidos, el interés en los Paralímpicos fue mucho mayor del esperado.
Craven agradeció de un modo especial a los atletas que ‘con sus desempeños alcanzaron un nuevo nivel’ en esta clase de deportes.
En total, los 3 mil 969 deportistas establecieron 304 récords mundiales y 448 plusmarcas paralímpicas.
El programa de la ceremonia de clausura se redujo drásticamente por causa del trágico accidente de autobús ocurrido en la víspera, y se suprimieron los números artísticos y festivos previstos.
Tras un minuto de silencio en homenaje a las víctimas -todos ellos estudiantes griegos, la totalidad de las delegaciones participantes ingresaron al estadio Olímpico. Pero no se realizó la tradicional marcha de las delegaciones con abanderados.
Posteriormente, se procedió a la entrega de la bandera del paralimpismo, con un nuevo logo, a representantes de Pekín 2008, donde se realizarán los próximos Juegos de verano, y al apagado del fuego paralímpico.
Completadas las 525 pruebas de los Juegos, China se consagró como la gran ganadora de Atenas 2004, con un total de 141 medallas (63 de oro, 46 de plata y 32 de bronce).

