La irrupción estelar del velocista panameño Alonso Edward y del vallista puertorriqueño Javier Culson alivió en cierto modo las desilusiones de dos de las grandes referencias latinoamericanas en los Mundiales de atletismo de Berlín: Irving Saladino y Dayron Robles.
La triplista cubana Yargelis Savigne revalidó su título mundial escoltada por su compañera Mabel Gay, y el mexicano Eder Sánchez devolvió a su país a la elite de la marcha.
Ambos fueron otros dos grandes protagonistas en positivo junto a otros miembros de la delegación cubana, como el decatleta Leonel Suárez, la discóbola Yarelis Barrios y el triplista Alexis Copello.

