El mal tiempo obligó a la suspensión de numerosos partidos, entre ellos el que enfrenta al argentino Guillermo Coria, tercer preclasificado, con el sudafricano Wesley Moodie, que el lunes ya había sido interrumpido por falta de luz cuando estaba igualado en dos sets. Ayer tampoco se pudo completar el quinto set, que se completará hoy miércoles con un 5-3 y servicio para "el Mago".
En tanto, el español Rubén Ramírez Hidalgo fue un duro escollo para el quinto preclasificado Henman, al llevarse el primer set de un partido que se extendió por casi dos horas. Finalmente, el británico se impuso con mucho más trabajo del esperado por 4-6, 7-6 (8-6), 6-4 y 6-2.
"En algunos momentos me sentí frustrado. Hubo algunos aspectos positivos, pero también algunas cosas que me dieron trabajo", declaró Henman, quien recientemente sorprendió al alcanzar las semifinales de Roland Garros.
"Hoy (ayer) no di lo mejor de mí, pero encontré el camino a la victoria. Algunas buenas cosas pasan de ese modo", agregó.
También avanzó con dificultades a segunda ronda Moyá, que derrotó al francés Olivier Patience en cinco sets por 6-4, 3-6, 7-5, 6-7 (6- 8) y 6-1.
El mallorquín, cabeza de serie número 9, se enfrentará en la segunda ronda al checo Radek Stepanek, que eliminó a Alex Corretja, con el objetivo de avanzar en la hierba londinense, que no es superficie.
"Podría haber definido antes, pero no lo hice mal. Llevo unos cuantos días entrenando ya y cada vez me voy sintiendo mas cómodo", dijo Moyá sobre su primer partido en el tercer Grand Slam del año.
El finalista de 2003 Mark Philippoussis tuvo ayer motivos para sonreír, después de una mitad de año para el olvido.
El australiano y undécimo preclasificado superó al cualificante belga Christophe Rochus por 6-3, 6-4 y 6-2.
"Estaba un poco nervioso, pero fueron nervios positivos, buenos para mí", afirmó el "Scud", que el año pasado perdió la final de Wimbledon a manos del suizo Roger Federer.
Por su parte, la máxima favorita Serena Williams, que busca su tercer cetro consecutivo en el All England Club, demolió a la china Jie Zheng por 6-3 y 6-1 y se manifestó satisfecha por su debut sobre hierba en un año.
"No hay nada tan especial como volver a Wimbledon como campeona. No tengo esa sensación en ningún otro Grand Slam", dijo Serena.
