Varias víctimas de abuso sexual de Larry Nassar testificaron ayer martes en el juicio que podría llevar al exmédico del equipo de gimnasia estadounidense a la cárcel de por vida.
Nassar, de 54 años, acudió a la vista en Lansing, Michigan, vestido con el atuendo azul de su prisión.
Cabizbajo y sujetándose la cabeza con las manos, Nassar escuchó los impactantes testimonios de sus víctimas. Algunas quisieron hacerlo en persona, mientras que otras lo hicieron anónimamente. Nassar “me robó la inocencia, la privacidad, la seguridad y la confianza”, explicó en la corte la exgimnasta Jade Capua.
Los abusos fueron “una experiencia que me cambió la vida, que me robó la inocencia demasiado joven”. “Estoy realmente orgullosa de ti”, respondió la jueza Rosemarie Aquilina tras escuchar su testimonio.