El campeón olímpico alemán en lanzamiento de disco Lars Riedel se quejó amargamente de los estrictos controles antidopaje que practican la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y la Agencia Antidopaje Alemana.
"Un día, los atletas llevaremos todos una esposa electrónica en el pie para que se sepa el lugar exacto en el que estamos", dijo, en declaraciones publicadas por el diario alemán Die Welt, el deportista que cosechó oro en 1996, plata en 2000 y cinco títulos mundiales.
Riedel, a quien en un programa televisivo se acusó de no haber estado presente para someterse a tests sin previo aviso en cinco oportunidades, reiteró que sólo una vez no notificó su ausencia y que posteriormente remitió las consiguientes explicaciones.
El atleta se quejó de que también aquella vez fue contabilizada como missed test. "Eso es perverso", se indignó.
El deportista de 39 años criticó el hecho de que hasta para visitar amigos cerca de su casa debe dar parte a las autoridades de control y está obligado a enviar faxes a la IAAF y a la agencia nacional antidopaje con la dirección del cine al que quiere ir a ver una película. Y si no le gusta el filme y quiere ir a otro lado, también tiene que notificarlo, se quejó.
