Nadar, correr y pedalear sin cesar. Ese es el resumen de la pasión de Pedro Cordovez, un atleta que escogió el deporte de la triatlón como escape a las presiones cotidianas. Y aunque tenga que dar a cambio tiempo valioso para entrenar y estar listo para las pruebas tanto nacionales como internacionales, el empeño y dedicación marcan la diferencia en su vida.
Su mirada está enfocada ahora en la Triatlón Internacional ‘Agua Brisa’ de Portobelo, que se realiza este domingo 11 de marzo.
–De tantos deportes, ¿por qué elegiste la triatlón?
–La verdad que todo comenzó porque me gustaba mucho la bicicleta y las competencias. Un amigo probó suerte en la Triatlón de Sherman, y cuando me contó quedé con las ganas y allí empecé a formalizar el entrenamiento. Luego de mi primera triatlón no he podido parar.
–Háblame de tus entrenamientos, ¿qué haces?
–Ahora los entrenamientos son muy específicos con miras a completar la prueba de ‘IronMan Brasil’ en mayo. Básicamente los entrenamientos son dos veces al día. En la mañana correr o bicicleta, y en la tarde natación o gimnasio.
Estoy entrenando con Ronán Pavoni, un profesional de triatlón argentino que coordina los entrenamientos, desde las distancias hasta la intensidad.
–¿Tienes alguna dieta específica antes de las competencias?
–Los entrenamientos de triatlón de por sí hacen perder grasa; lo único que hago es procurar darle al cuerpo lo que necesita para recuperarse. Es decir, proteínas, carbohidratos y una dieta balanceada.
–¿Qué piensas de la Triatlón de Portobelo, es más que una competencia?
–La Triatlón de Portobelo es mi favorita; aparte de ser una triatlón dura, es muy autóctona. Viene gente de afuera a hacer esta competencia que ya tiene fama mundial.
Es difícil por lo que requiere de entrenamiento.
–¿En qué categoría compites?
–En la categoría de 30 a 39 años. Allí hay gente muy buena y una camaradería excelente. En triatlón, como es un deporte individual, el máximo rival es el reloj y terminar es un logro enorme.
¿Cuál es tu fuerte en triatlón, bicicleta, natación o corrida?
–Por el solo hecho de que llevo más tiempo montando bicicleta que las demás disciplinas, digo que soy más fuerte pedaleando. En la corrida me va bien también, pero paso trabajo en la natación.
La natación es muy técnica y requiere de mucho tiempo, aunque intento mejorar.
–¿Cómo divides tu tiempo entre el triatlón y tu familia?
–Yo le digo a mi esposa que el triatlón solo le quita tiempo a mi sueño, pero eso es mentira. Sin el apoyo de ella sería imposible hacer esto. Me levanto a las 5:30 a.m. a entrenar varias veces a la semana y después del trabajo, como a las 6:00 p.m., usualmente voy a nadar por una hora.
Después, como a las 7:30 p.m. llego a la casa a compartir con mi familia.
Lo importante es que mi esposa y mis hijas saben que me gusta y comparten conmigo.
–¿Tienes algún ídolo en el deporte? Si lo tienes, ¿quién es y por qué?
–Lance Armstrong. Porque él ha demostrado que uno puede conseguir lo que quiere con dedicación y esmero, y aunque estuvo a un paso de la muerte no se dio por vencido, siguió adelante con convicción y logró metas que antes eran inalcanzables, como ganar siete veces la carrera de ciclismo más dura del mundo, el Tour de France. Realmente es admirable.
