El árbitro italiano Pierluigi Collina, uno de los mejores colegiados del mundo y sin duda el más famoso de la profesión, anunció ayer su retirada del arbitraje profesional después de 28 años de servicio.
Los problemas que le han enfrentado a la Federación Italiana de Fútbol (FIF) han podido con la trayectoria de este árbitro italiano, varias veces designado como el mejor del mundo y con un amplio bagaje en importantes competiciones internacionales, como Mundiales o Eurocopas.
Un acuerdo publicitario con Opel fue el que ocasionó que la Federación Italiana le impidiera arbitrar la presente temporada en Primera División al considerar que su contrato con la firma automovilística alemana podía suponer un conflicto de intereses con su cargo, ya que esta patrocina también al Milan.
"Hemos perdido todos", aseguró ayer Collina en una rueda de prensa en la localidad de Lucca, al norte de Italia, "Para mí no sería un problema arbitrar una temporada entera en Segunda División, pero el problema es si se confía en los árbitros o no. Sin confianza en un árbitro es inútil seguir adelante", expresó.
El italiano indicó también que nunca ha requerido autorizaciones para sus campañas publicitarias anteriores (que han sido múltiples en los últimos años debido a que su fama se ha llegado a equiparar con la de algunos jugadores) y agregó que la Asociación de Árbitros de Italia conocía su contrato con Opel y no puso ninguna pega al respecto.
DiecisietE años de pitar
Collina, nacido en Bolonia hace ahora 45 años, comenzó en el arbitraje con 17 gracias a un compañero de escuela que le animó a acudir a un curso de árbitros. En 1991, con 31 años, debutó en la Primera División italiana y cuatro años más tarde entró en el círculo internacional de la FIFA, donde ha tenido el privilegio de arbitrar la final del Mundial de Corea y Japón y la final olímpica de Atlanta 96, entre otras competiciones.
Su amplia experiencia internacional y su carácter en el terreno de juego le convirtieron en una de las figuras más respetadas del panorama mundial. Por ello no es de extrañar que su dimisión haya generado reacciones en todo el mundo del fútbol, especialmente en Italia.
LAMENTAN RETIRO
Marcelo Lippi, seleccionador nacional italiano, ha sido uno de los que se han mostrado más afectados con la decisión de Collina.
"Es una gran pérdida. Siento mucho la decisión que ha tomado. Lo he visto muy decepcionado", indicó Lippi.
Por su parte, Giacinto Facchetti, presidente del Milan, indicó que con la retirada de Collina "se pierde al mejor árbitro del mundo" y añadió que "su ausencia se dejará notar en un campeonato difícil con partidos muy importantes".
El repentino adiós de Collina dejará un vacío en el arbitraje mundial. Su renuncia en la Asociación Italiana de Árbitros afecta también a su condición de internacional, ya que son las asociaciones nacionales las que proponen a la UEFA la relación de colegiados elegidos para ser internacionales.
Para empezar, Collina no podrá dirigir el partido de clasificación para el Mundial que disputarán España y Serbia el próximo 7 de septiembre en el Vicente Calderón y que estaba confirmado desde julio que arbitraría el colegiado italiano.
El colegiado inglés Graham Pool suplirá a Pierluigi Collina en la dirección del partido España-Serbia y Montenegro del próximo día 7 de septiembre en Madrid, de clasificación para el Mundial de Alemania .
