Con la contratación de Dusty Baker como su próximo mánager, los Rojos de Cincinnati han hecho un cambio pronunciado de filosofía al apelar a un individuo sin lazos con la organización.
La última vez que un foráneo llegó al club fue hace 18 años y Cincinnati ganó la Serie Mundial. Eso fue en 1990 con Lou Piniella.
Los Rojos confirmaron ayer, domingo, que Baker, de 58 años, será su nuevo piloto tras firmar un contrato de tres campañas. El ex mánager de los Cachorros y Gigantes será presentado hoy, lunes.
El cambio captó la atención de los jugadores. En vez de promover a coaches o scouts de la franquicia, los Rojos optaron por alguien sin ningún tipo de vínculo. Durante 14 temporadas como piloto, Baker condujo a San Francisco a la Serie Mundial y a los Cachorros de Chicago a los playoff.
"Desde que he estado aquí, nunca hemos tenido un mánager de renombre", declaró entusiasmado el derecho Aaron Harang, quien lleva cinco temporadas con los Rojos.
Durante ese lapso, tampoco han completado una campaña con saldo favorable de victorias y derrotas.
Baker sustituye al mánager interino Pete Mackanin.

