Raúl González, capitán del Real Madrid, resucitó ayer a su equipo en Sevilla, marcando el tercer hat trick de su carrera en Liga y de paso acercarse a cuatro puntos del líder Barcelona.
Raúl apareció de nuevo en un momento decisivo. Al ritmo de sus goles al primer toque, su especialidad, el Real Madrid remontó al Sevilla en el estadio Sánchez Pizjuán y ganó de visita 4-2.
Inyectó oxígeno a su equipo cuando la Liga se escapaba con una lección de efectividad. Tres goles en tres remates a puerta durante los 68 minutos que estuvo sobre el terreno de juego.
El primero a pase desde la derecha de Christoph Metzelder. El segundo con centro desde el costado izquierdo de Miguel Torres. El último aprovechando un error de Andrés Palop al no blocar un potente disparo de Gonzalo Higuaín.
Tres dianas que colocan a Raúl en su mejor temporada anotadora desde la campaña 2002-03. Alcanza 24 tantos repartidos entre los 18 de Liga, tres de Liga de Campeones y tres de Copa del Rey. Y le restan cinco finales para seguir cazando.
Ayer, lo hizo ante el Sevilla, en esos duelos siempre calientes en los que se maneja como pocos y deja su huella. En 21 enfrentamientos ligueros le ha marcado 12 tantos.
Pocos tan decisivos como los de una jornada en la que el Real Madrid estaba obligado a aprovechar el pinchazo del Barcelona.
El Sevilla entra desde este momento entre las víctimas elegidas de Raúl, junto a Espanyol (16 goles marcados) y Valladolid (15).
El capitán blanco, leyenda del madridismo tras superar esta temporada a Alfredo Di Stéfano como máximo artillero en la historia del club, alcanza 224 goles en Liga. En la historia de la Liga ya es el quinto goleador acercándose a los 251 de Telmo Zarra y los 234 de Hugo Sánchez.
VEA Raúl enciende la Liga española
