El mejor golfista del mundo, Tiger Woods, se desplazó ayer desde China hasta Japón para defender desde hoy, jueves, su título del Dunlop Phoenix, que se disputa en la cuidad de Miyazaki.
Tiger ganó este torneo en 2004 con una ventaja de ocho golpes, que de paso le sirvió para quebrar una racha sin triunfos desde febrero de ese año y que puso fin a las conjeturas sobre sus cambios técnicos en el swing.
"Siempre me entusiasma volver a Japón. La gente es muy amigable y respetuosa", dijo el jugador californiano, segundo clasificado el domingo en el HSBC de Shanghai (China) en donde soportó con resignación el asedio de cientos de aficionados chinos.
Woods concluyó la campaña oficial de 2005 como líder de ganancias con más de 10 millones de dólares, tras seis victorias en el PGA Tour, incluidos dos torneos de Grand Slam (Masters y Abierto Británico) y otros dos correspondientes a los Campeonatos Mundiales WGC (NEC Invitational y American Express).
El año pasado, Tiger firmó cuatro rondas de 65+67+65+67 en el par 70 del campo de Phoenix (Miyazaki), con lo que logró su primer triunfo de 2004 en un torneo "medal play".