A pocas horas de que comparezca hoy, lunes, ante la Corte Arbitral del Deporte (CAS) acusado de dopaje, el atleta estadounidense Tim Montgomery decepcionó en la reunión atlética de Eugene, la que pudo haber sido su última carrera.
El compañero sentimental de la también velocista Marion Jones sólo pudo ser séptimo con un discreto tiempo de 10.10 segundos en los 100 metros, prueba en la que posee la plusmarca mundial.
"Vine para ver cómo me siento", dijo Montgomery, que admitió que todo el proceso por dopaje contra el laboratorio californiano BALCO, en el que se encuentra implicado, le está suponiendo una carga.
"Intento mantener la cabeza limpia, pero no me puedo engañar", reconoció su preocupación.
El velocista comparecerá a partir de hoy, lunes, en San Francisco ante la CAS, después de que el atleta de 30 años fuera acusado por la Agencia Antidoping de Estados Unidos (USADA) de estar implicado en el escándalo del laboratorio BALCO.
BALCO supuestamente suministró sustancias prohibidas a muchos atletas estadounidenses. Montgomery se enfrenta a una sanción de por vida si es encontrado definitivamente culpable, por lo que la reunión atlética estadounidense de Eugene pudo ser su última carrera.
El estadounidense centró la atención, pero durante la carrera los protagonistas fueron su compatriota Justin Gatlin y el jamaicano Asafa Powell. Con un viento irregular de 3.4 metros por segundo, Gatlin, campeón olímpico, se impuso con un tiempo de 9.84 segundos.