Se trata de solo la última de las causas en las que el "Torito" se vio involucrado en estos años. Ayala fue acusado en 1983 de violación en Nueva Jersey y condenado a 15 años de reclusión. Después fue excarcelado, en libertad condicional, en 1999.
Posteriormente, regresó a su ciudad natal, San Antonio, en Texas, donde probó reconstruir su carrera, pero en 2001 tuvo nuevamente problemas con la ley: ingresó en la casa de una mujer después de haber roto una ventana y ella le disparó hiriéndolo en el hombro derecho. Tiempo después la Policía lo detuvo por exceso de velocidad y lo encontró desprovisto de licencia de conducir y con drogas. "Le dieron numerosas oportunidades, pero Tony parece ser incapaz de respetar las leyes", comentó la secretaria pública Susan Skinner, que lo condenó a transcurrir los próximos 10 años en la cárcel, sin posibilidades de que consiga algún tipo de beneficio. En tanto, el abogado de Ayala, Jimmy Parks, afirmó: "está verdaderamente deprimido, destrozado por todo lo ocurrido. Ahora Tony es un hombre destruido".

