Para el fornido toletero chiricano Víctor Preciado, los tiempos en que empuñaba un bate buscando conectar un imparable o un cuadrangular han quedado atrás, igual que defender la primera base del equipo de béisbol de Chiriquí.
Tras un año de haberse retirado oficialmente de los torneos nacionales, Preciado ha cambiando su rol de pelotero al de preparador físico y de igual como instructor de pequeñas ligas.
Luego de su retiro, se puso a disposición de la dirigencia chiricana como preparador físico, aprovechando sus conocimientos adquiridos durante su permanencia con la cadena de los Yankees de Nueva York.
Al aceptarse su solicitud se sumó al preseleccionado chiricano mayor desde diciembre junto al resto del cuerpo técnico.
Explicó que en coordinación con los instructores del equipo, estableció un programa de preparación diferente al de temporadas pasadas, basado en buscar un mayor y mejor grado de resistencia en los peloteros, haciendo énfasis en las piernas.
Opinó que muchos peloteros sufren a menudo lesiones en esa zona achacando esto a las malas condiciones de los terrenos de los estadios en que se juega el nacional mayor.
Satisfecho
Sostuvo estar satisfecho por lo ocurrido en lo que va del actual torneo, citando que si se analiza o cuantifica la cantidad de peloteros lesionados está muy por debajo de los niveles anteriores, que incluso de los que se prevén han de darse, lo que indica que sí se está cumpliendo con lo programado y los resultados así lo demuestran.
Dijo que ésta es una gran oportunidad que le han brindado y no la dejará escapar.
"Para mí significa estar en una vitrina dándome a conocer en un nuevo rol desconocido por muchos y sé que vendrán tiempos mejores", pronosticó.
Aseguró que la experiencia que ha tenido como pelotero y más dentro de las selecciones de Chiriquí han sido importante para poder desarrollarse como preparador, ya que como pelotero sabe cuáles son las debilidades que existen en la mayoría de cada uno de ellos.
Agregó que está consciente de que la segunda fase del torneo es dura, donde se pondrán a prueba las verdaderas condiciones físicas de cada pelotero.
"Es donde salen a reflejarse en ellos lo que traen los constantes viajes y partidos", destacó el ex pelotero que militó en las finca de los Yankees.





