INDIANAPOLIS, EU (EFE). - Argentina, campeona en la primera edición del Campeonato del Mundo, pero ajena al podio desde entonces, jugará por el oro de Indianápolis 2002 contra Yugoslavia, la selección que más metales mundialistas acumula en su palmarés, aunque la sorprendente Nueva Zelanda la hizo sufrir durante 26 largos minutos.
El conjunto plavi, vigente campeón mundial, marchó durante dos cuartos y medio largos por detrás en el marcador y eso que los kiwis, la auténtica revelación del campeonato, jugaron sin uno de sus mejores jugadores y anotadores, el pivot Sean Marks, lesionado en un ojo y ausente desde la segunda fase.
Pues aun así, Nueva Zelanda compitió de tú a tú frente a la poderosa maquinaria europea durante prácticamente todo el partido. Es más, Yugoslavia llegó a tener una desventaja de 15 puntos en el minuto 14 (19-34) y no subió su primera renta al marcador hasta el minuto 26 (57-56) gracias a un triple del base Milos Vujanic.
El excelente rendimiento del quinteto inicial neozelandés y los mediocres porcentajes en el tiro yugoslavos marcaron ese largo periodo de dominación oceánica.
Phil Jones, Pero Cameron, Ed Book y Kirk Penney ya habían superado la barrera de los 10 puntos en sus respectivos casilleros antes de llegar al descanso (48-39).
Mientras tanto, los yugoslavos firmaban un impropio 41% en tiros de campo.
Pero Yugoslavia es la campeona del mundo, la que más medallas ha logrado en la competición más importante del planeta, donde ya acumula 10, aunque falta por ver de qué metal será la de este Mundial.
Yugoslavia hasta el juego de hoy tiene siete medallas consecutivas.
