El argentino Diego Milito tuvo una jornada de ensueño al anotarle cuatro goles al Real Madrid ayer, miércoles, y encaminar al Zaragoza a una sensacional goleada de 6-1 en las semifinales de la Copa del Rey.
El brasileño Ewerthon anotó los otros dos tantos zaragozanos en el estadio La Romareda, mientras que su compatriota Julio Baptista marcó el solitario gol madrileño.
Zaragoza tiene el pase a la final casi en el bolsillo y la revancha de la semana que viene en el Santiago Bernabeu asoma como un partido de trámite a la luz de la ventaja que sacó en el choque de ida.
Fue el primer revés del año para el Real Madrid, que vio interrumpida una racha de siete victorias seguidas en la liga y la Copa. Los madrileños, retrasados en el campeonato nacional, no ganan un título importante desde 2003 y apuntaban todos sus cañones a la Copa.
Fue la peor derrota del equipo blanco desde el 9 de junio de 1999, cuando perdió por 6-0 ante el Valencia en otras semifinales del torneo.
Desde 1957 un solo jugador no le anotaba tantos goles al Real Madrid, y el argentino Milito nunca había marcado cuatro goles en un partido oficial en su país.

