El incidente se produjo en el encuentro de la semana pasada entre Blooming y Oriente Petrolero.
Jáuregui y Leonardo Medina fueron expulsados por un altercado, y mientras el futbolista uruguayo salía de la cancha, Jáuregui lo agredió con una patada voladora al cuello.
“Me volví loco y se me puso la mente en blanco. Si pensaba en ese instante no lo hacía. Fue algo terrible. Llegué a mi casa y no podía ver a mi hija. Tiene apenas nueve meses, pero este caso directa o indirectamente puede afectarla”, dijo Jáuregui.
El futbolista se defendió diciendo que “nunca tuve una actitud de esas características”.
Medina fue hospitalizado brevemente a raíz de la patada, y los médicos le ordenaron permanecer alejado 12 días de las canchas hasta la recuperación completa.

