Harmodio Arrocha Jr.harrocha@prensa.comNo es fácil decir adiós y menos para un pelotero que tuvo que vencer muchas barreras antes de llegar a las Grandes Ligas.
Ciertamente no, reconoce el pelotero profesional José El Toro Macías, mientras repasa en su mente en un entrenamiento en el estadio Rod Carew, acompañado del piloto Ricardo Medina, los sacrificios y los difíciles momentos por los que pasó su madre, Juana Salazar, hasta verlo alcanzar su sueño más grande.
Macías, un diminuto jugador que alcanzó la cima con los Tigres de Detroit, en la campaña de 1999, no ha desmayado en sus objetivos y ha seguido trabajando como una máquina en el terreno.
Salazar fue una humilde cocinera que dio de comer a muchos obreros, en las frías alturas de unos montes ubicados en Cerro Azul, para llevar el sustento diario.
Ella fue su principal fuente de inspiración para llevarlo a alcanzar su meta y tras dos temporadas inciertas en las fincas de Ligas Menores, Macías se prepara diariamente para tratar de volver a las Grandes Ligas.
Recuperado de lesión
Alejado de las lesiones que lo afectaron en la pasada campaña mientras jugaba con los Nacionales de Washington, el infielder capitalino está listo para alcanzar su primer objetivo en esta difícil misión: pelear un puesto en el entrenamiento primaveral de los Piratas de Pittsburgh.
Física y mentalmente esa es la impresión que deja a simple vista este incansable trabajador tras una sesión de práctica en el Tour Chico Heron, un campamento reservado para jugadores profesionales.
"Ya tengo el contrato firmado de los Piratas y me estoy preparando con todo los hierros para volver a las Grandes Ligas", dijo un optimista Macías.
Los Piratas le extendieron una invitación para el campamento de ligas menores al panameño.
MÁquina del trabajo
El Toro, quien comenzó a trabajar con el finado Chico Heron, siendo scout de los Yankees de Nueva York, sudó a chorro mientras corría y hacía algunos ejercicios al aire libre.
"Es una buena oportunidad, ya que los Piratas están en una fase de reconstrucción y voy a tratar de llegar al entrenamiento en mi me mejor forma posible", aseguró el versátil jugador que terminó la campaña 2007 en clase AAA con los Cerveceros de Milwaukee.
Macías, que siendo un novato fue descartado por los Yankees por ser demasiado pequeño, también jugó en las GrandesLigas con los Cachorros de Chicago.
