Ortega, que viaja este lunes 27 a Colombia, para enrolarse con su club Independiente Medellín, consideró injusto el trato que se le dio.
A raíz de esto el jugador panameño ya se hizo a la idea de no volver a jugar con la selección mientras esté Stempel como entrenador.
No hay caso, nunca le caí bien, no sé porqué, pero así es la vida, no somos moneditas de oro para caerle bien a todo el mundo, dijo el jugador.
Ortega, de 19 años de edad, precisó que desde que llegó a la selección pensó siempre en darlo todo, en aportar un granito de arena, pero se lamentó de que no se le hubiese dado la oportunidad.
Lo que me queda ahora es rendir en mi club Medellín, yo no le guardo rencor a nadie ni estoy traumatizado, lo único que me queda es desearle la mejor de las suertes a los muchachos, indicó.
El jugador chiricano señaló que en ningún momento se ha sentido superior al resto de sus compañeros, no se considera arrogante, y tampoco le parece que le haya faltado humildad. El (Stempel) dijo unas declaraciones que son totalmente falsas, yo no cometí ningún tipo de indisciplina durante la concentración, dijo.
Sin embargo, reconoció que su actitud del domingo, después del partido contra México, cuando se quedó sentado en la banca sin festejar de la victoria, lo hizo en un momento en que tenía la cabeza caliente.
Me sentí mal, estaba frustrado, no me dieron la oportunidad, yo quería ayudar al equipo. Por eso no festejé con el resto de mis compañeros. Fue una medida de protesta, comentó.
Ortega metió un gol frente a Canadá, después de entrar en el segundo tiempo, volvió a jugar ante Paraguay y no fue de la partida contra los mexicanos.
En los dos partidos entró como suplente, jugó 39 minutos entre los dos partidos. Frente a Canadá ingresó a los 13 minutos del segundo tiempo en reemplazo de César Aguilar, cuatro minutos más tarde anotó el segundo en una jugada de oportunismo, frente a un error del portero Daniel Fernández.
Contra Paraguay ingresó a los 28 minutos en reemplazo de James Brown.
Lo que pasa es que Stempel me tenía apartado. No le caí bien, se notaba a leguas. Y cuando me dijo que ya no formaba parte del equipo hasta lo hizo con cierta ironía, denunció.
El jugador comentó que en vísperas del partido con México tuvo fiebre, lo dio a conocer, pero nunca se le dio atención médica.
Nadie apareció. Esto es una muestra de que me tenían apartado, precisó.
No quería nada conmigo. Es más, cuando unos periodistas le preguntaron por mí, él les contestó que si acaso ellos estaban enamorados de Ortega. Eso es una falta de respeto, dijo.
Ortega aseguró que con el Medellín no va a ocurrir lo mismo, porque allá se cobra, se entrena todos los días y siempre se está a la espera de una oportunidad. En la selección es diferente, uno viene de otro país ilusionado con dejar todo lo de uno en la cancha.