El presidente de la Federación Panameña de Fútbol (Fepafut), Ariel Alvarado, afirmó el martes de manera tajante que no se siente culpable del fracaso que tuvo el fútbol en 2008.
“Los que quieran buscar cabezas y encontrar culpables, en mí no lo van a encontrar, porque yo no soy culpable de nada”, señaló Alvarado sin titubeos y visiblemente tranquilo durante la presentación de la nueva camiseta de la selección.
“Hemos tenido muchos días de sol y ahora hemos tenido muchos días de lluvia y aguacero fuerte. Volverá el sol. Yo creo que todo volverá a la normalidad terminando este ciclo. Tenemos que comenzar de nuevo”, indicó.
Alvarado fue reelegido presidente de la Fepafut el sábado 30 de septiembre de 2006 y su periodo culminará en 2010.
¿Los jugadores fueron los perdedores del año?
“Yo no voy a decir quién perdió, todo el mundo sabe que los resultados se dan en la cancha”, respondió.
Y agregó que “por más preparación que se tenga hay que recordar que la selección no juega sola, enfrente siempre habrá un rival que también se prepara para lo mismo. Las posibilidades de los resultados se pueden dar y en ese caso nos ha tocado la mala fortuna. La suerte también juega”.
Dijo que a veces “esperamos mucho de un equipo, se crean falsas expectivas y cuando no se logra el objetivo, todo se desvanece”.
En ese sentido, puso como ejemplo a la selección Sub 17 de la que dijo se le ha recargado “demasiado a una selección que es de niños, ellos no tienen ninguna responsabilidad de lo que pasó con las selecciones mayor, Sub 23 y Sub 20”.
“Cada selección tiene sus responsabilidades y aquí cogieron a la Sub 17 como la última esperanza del fútbol panameño y están totalmente equivocados, ese es el futuro del fútbol de Panamá, no la última esperanza”, apuntó.
