El lanzador dominicano Roberto Novoa Peña, quien prestará sus servicios esta temporada para el equipo de Chiriquí, dijo que se encuentra alcanzando la velocidad y su físico para el campeonato nacional que se avecina.
El gigante de ébano, de 6.5 pies de estatura, dijo que se ha adaptado rápidamente al sistema de entrenamientos y de manera muy importante al resto de sus ahora compañeros peloteros chiricanos, lo cual consideró es importante para alcanzar cualquier objetivo, en este caso ganar el título de campeones.
Sostuvo que el béisbol a este nivel es un trabajo en el cual se involucran muchas cosas, responsabilidad, esfuerzo y trabajo en conjunto.
Expresó que como un trabajo igual hay que saber disfrutarlo todos los que integran un equipo, eso ayuda a aliviar la carga emocional que se da durante estos campeonatos, del cual le han comentado se viaja mucho en autobús de provincia a provincia.
Opinó que al grupo de peloteros le gusta trabajar, entrenar y estar concentrados en hacer las cosas bien, como profesional todos deben tener un criterio de ser serios, de hacer las cosas bien, pero igualmente hay que saber como relajarse.
Aceptó que actualmente en Chiriquí está haciendo mucho calor, temperatura que calificó muy similar a la que se vive en su pueblo natal de Carellegua.
“Para muchos es un lugar muy poco conocido, ya que solo dos peloteros han jugado pelota profesional en las grandes ligas, Valerio de los Santos un primo mío y yo”, subrayó.
Dijo que actualmente está lanzando a una velocidad de 90 millas por hora, pero que ha de mejorarla un poco más.
El pasado sábado en un partido de fogueo realizado en el Kenny Serracín ante Panamá Metro registró 92 millas.
Novoa recordó que durante el año 2007 tuvo un accidente automovilístico que lo alejó por meses de la pelota, pero que paulatinamente se fue recuperando de ciertos dolores que lo aquejaban.
“Con el trabajo especial realizado he estado de nuevo en la lomita de lanzar”.
Opinó que el béisbol es una profesión como en el caso de él, la cual, advierte, para poder apoyar a la familia económicamente, que es lo que la mayoría de sus hermanos dominicanos busca en este deporte.

