Aquel lunes 18 de agosto de 2008, el tráfico no era tan pesado en las principales avenidas, a pesar de que ya se acercaba la hora de entrada de labores para la mayoría de los panameños.
Las puertas cerradas, las radios y los televisores encendidos. Silencio en las calles.
En su cuarto intento en la final del salto largo en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, el colonense Irving Saladino alcanzó 8.34 metros, un registro bastante lejos de su mejor marca de 8.73 (Hengelo, 2008) para llevarse así el oro en esta justa.
´El Canguro´, como muchos le llamaban antes de que él mismo solicitara se cambiara este apodo, se convertía en el primer atleta panameño en ganar una presea dorada en Juegos Olímpicos. Historia nacional.
La medalla dorada de Saladino era el fruto de años de entrenamientos, y una preparación que había comenzado en 2004, luego que Saladino fuera eliminado en los Juegos Olímpicos de Atenas, Grecia.
Ese mismo año, el colonense viajó a Brasil, donde entrenó con Nelio Moura, quien lo llevó al triunfo en su primera competencia, en Santiago de Chile en mayo de 2005, de cara a su preparación hacia Beijing.
Desde aquel entonces, Saladino se convirtió en una máquina, cosechando 16 triunfos en 21 competencias entre 2005 y 2006 (ver tabla).
En 2007, el panameño tuvo registro perfecto al conquistar las nueve competencias en las que participó.
Al año siguiente, además de la medalla de oro en Beijing, Saladino sumó cinco triunfos en seis eventos.
En total, durante esos cuatro años, Saladino logró 31 victorias en 37 competencias, para un porcentaje de triunfo de 83%.
Cuatro años después del significativo hito en el deporte panameño, el campeón olímpico, estremecido por varias lesiones, apenas suma siete primeros lugares en 19 eventos, para un minúsculo porcentaje de victorias de 36% de cara a su participación en Londres 2012.
ENTRE FALTAS Y LESIONES
Tras la medalla, las competencias de Saladino sufrieron un notable descenso de casi el 50%.
La mayoría de sus ausencias fueron justificadas con diversas lesiones.
Sin embargo, cuando el panameño tenía las condiciones físicas para poder saltar, batallaba con las condiciones sicológicas, y fracasó en varios eventos debido a faltas técnicas.
Incluso, Saladino optó por terminar su relación con Moura en 2010 y volver a Panamá para trabajar de lleno con Florencio Aguilar, quien fuera el entrenador que lo introdujo al salto largo, su aproximación a la fosa.
“La tabla siempre se ha estado trabajando, pero cuando llega la competencia, las cosas cambian”, expresó Florencio Aguilar. “El problema es una cuestión mental y hay que seguir entrenando”.
Aguilar manifestó que la principal razón por la disminución de eventos en los que ha participado Saladino se atribuye, además de las distintas lesiones, a una distinta programación. “Un atleta de la talla de Irving no se puede desgastar en tantos torneos, hay que ser más selectivos”, dijo Aguilar.
No obstante, ante las molestias físicas que han sacado de ritmo al campeón, Aguilar confirmó que Saladino estará viajando en los próximos días a Venezuela, donde participará en el Campeonato Iberoamericano de Barquisimeto.
“Luego intentaremos estar en algunas pruebas de la Liga de Diamante antes de ir a Londres”, sostuvo Aguilar.
Por su parte, el atleta indicó estar recuperado de la intervención en la rodilla izquierda, a la vez que manifestó que tiene muchas posibilidades de obtener el oro en Londres.
“Voy por el oro, quiero darle de nuevo esa alegría a mi país, por eso estoy entrenando fuerte”, dijo Saladino en una entrevista concedida a la agencia Reuters. “Estoy seguro de que cuando sean los Juegos Olímpicos estaré al cien por ciento para hacer lo mejor”.
REFLEJO EN el ´RANKING´
La clasificación anual que hace la Federación Internacional de Atletismo también da testimonio de las fluctuaciones en el desempeño del campeón olímpico.
Hacia Beijing 2008, Saladino obtuvo el mejor salto en 2006 y 2008.
El primero fue con un 8.56 en Brasil, mientras que en 2008 fue con un 8.73 en Hengelo, Holanda.
Esta marca ha sido la mejor que ha saltado el panameño en su trayectoria.
Ahora, en los últimos cuatro años, lo más cercano del panameño al tope de la clasificación fue en 2009, con un 8.63 en Oregon.
El año pasado, Saladino fue sexto con un 8.40.
El primer lugar de 2012 es para Greg Rutherford, quien domina con un 8.35.
