La guerra entre la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF) y Sudáfrica por el caso de Caster Semenya se recrudeció ayer tras la publicación en medios australianos de que el test de verificación de sexo realizado a la atleta concluye que es hermafrodita.
El ministro de Deportes de Sudáfrica, Makhenkesi Stofile, advirtió ayer que cualquier intento de excluir del atletismo a su compatriota, campeona del mundo de 800 metros en Berlín, conduciría a la tercera guerra mundial.
Stofile expresó en Pretoria “su shock y su disgusto” por el hecho de que medios internacionales informaran ayer del resultado de las pruebas llevadas a cabo por la IAAF. Veintiun días después de su contundente victoria en el Mundial de Berlín, el diario australiano Daily Telegraph, entre otros, publicó ayer que Semenya es hermafrodita.

