El Gobierno alemán comunicó su rechazo a participar en el plan global de rescate ideado por el Gobierno estadounidense para enfrentar la crisis financiera.
“Para nosotros existen diferencias tanto en la responsabilidad como en los efectos”, enfatizó en Berlín, Ulrich Wilhelm, portavoz de la canciller alemana, Angela Merkel.
Por ello, según dijo, el Ejecutivo alemán no considera necesario poner en marcha medidas similares a las de Estados Unidos, que ha anunciado uno de los planes más caros de su historia: la inédita inyección de 700 mil millones de dólares para sanear la banca del país.
Según informaciones del Ministerio alemán de Finanzas, Estados Unidos todavía no ha solicitado ni a Alemania ni a los demás países europeos que tomen medidas.
El Gobierno alemán, sin embargo, ha acogido con satisfacción el plan de rescate de Washington, que en su opinión, es “un aporte importante” que ayudará notablemente a calmar la situación, dijo Wilhelm.
En ese sentido, el ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, aconsejó tras mantener una conferencia telefónica con sus homólogos del G7 (los siete países más desarrollados del mundo) y con los presidentes de los principales bancos centrales, que los planes del secretario estadounidense del Tesoro, Henry Paulson, sean aplicados de forma inmediata.
Para ello, el responsable de las finanzas alemanas pidió indirectamente a la Comisión Europea una mayor flexibilidad en sus controles para aquellos bancos europeos que eventualmente necesiten recibir ayudas estatales.
Steinbrück dijo que el G7 no pretende complementar con medidas semejantes el plan de rescate de Washington.
