Durante la jornada del pasado sábado fueron cancelados unos veinte vuelos por la repentina "indisponibilidad" de los asistentes de a bordo, tendencia en aumento el sábado entre las protestas de centenares de usuarios.
A primeras horas de la mañana se acercaban ya a 30 los vuelos suspendidos, mientras en el aeropuerto Leonardo Da Vinci de Roma y en el de Malpensa de Milán se vivían escenas de gran nerviosismo, debido a la falta de previsión y las informaciones contradictorias.
Según fuentes aeroportuarias, algunas cancelaciones se comunican cuando los pasajeros están a punto de embarcar, mientras aumentan las colas ante las oficinas de información y los mostradores de reclamaciones.
La medida de Alitalia de eliminar un asistente en cada vuelo entró en vigor ayer domingo para los trayectos nacionales y lo hará el 1 de julio para los internacionales.
Los sindicatos se oponen a esta medida y, además del paro "encubierto" del sábado y denunciado por la compañía, han convocado una huelga de cuatro horas para el próximo día 3, que se calcula afectará a cerca de 200 vuelos.
La compañía aérea italiana Alitalia ha reducido sus ingresos un 6.9% en el primer trimestre del año, cuantificados en 50 millones de euros (53 millones de dólares), informó la empresa al final de su Consejo de Administración. Como principal explicación de ese descenso en los ingresos está el conflicto en Irak.