El Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) solicitará al Ejecutivo una revisión de la política tributaria vigente y, más específicamente, del Cálculo Alternativo del Impuesto sobre la Renta (Cair), antes del 30 de marzo.
"La tasa aplicada al Cair -1.40%- debe ser revisada. El costo administrativo que implica para las empresas debe disminuir y toda la información que han pedido a los contribuyentes este año también es un exceso", advirtió José Javier Rivera, presidente del Conep. "Nos han solicitado el cumplimiento de otros impuestos que no tienen que ver con rentas y hay que centralizar el asunto".
El cálculo alternativo, junto con el auge económico y la modernización del sistema de recaudación, fue uno de los factores que determinó el fuerte aumento de los ingresos tributarios de Panamá en 2006.
La nueva metodología para la estimación del Impuesto Sobre la Renta le dejó al fisco más de 50 millones de dólares el año pasado, según datos de la Dirección General de Ingresos (DGI).
Pequeñas empresas
La Cámara de Comercio sigue preocupada por el impacto que esta herramienta fiscal ha tenido sobre el sector empresarial, especialmente sobre las pequeñas y medianas empresas (Pymes).
"El Cair está representando una carga tributaria exagerada para la empresa privada local, sobre todo para las Pymes", dijo el presidente del gremio, Diego Eleta. "Y nos preocupa principalmente su falta de equidad, pues las empresas que más se ven afectadas son las que tienen menores márgenes de ganancias".
La Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresas (Apede) y el Sindicato de Industriales de Panamá (SIP) tampoco se sienten a gusto con el actual orden de las cosas.
"No se debe castigar la inversión sino el consumo, pero con un impuesto que tase a las empresas como lo está haciendo el Cair se está castigando a la inversión y creando obstáculos a la inversión, y no resolverán nunca el problema del desempleo", afirmó el vocero de Apede, Antonio Fletcher.
El modelo EUROPEO
La SIP sugiere seguir el ejemplo que Irlanda y otros países europeos han dado.
"Están esperanzando a mucha gente diciendo que va a venir desarrollo y muchas inversiones, pero la estrategia tributaria que están aplicando no apunta en esa dirección", considera el presidente del sindicato de industriales, Gaspar García de Paredes.
"Debemos seguir a los países que han reducido la carga impositiva a la renta y a la utilidad de las empresas y que han pasado el peso de los impuestos al consumo", dijo.
A juicio de Paredes, el Cair presupone una rentabilidad muy alta y eso lo hace pesado para la mayoría de las empresas. "Y lo peor es que el trámite para solicitar la no aplicación del cálculo alternativo es harto complicado, sobrecargado de documentación y obliga a las empresas a involucrar a profesionales externos de la compañía para poder obtener ese beneficio, lo cual genera unos costos importantes y distrae a las empresas de lo que es su función principal, que es producir riqueza".
El Ejecutivo, al menos por ahora, no tiene previsto revisar el Cair y se muestra satisfecho con la efectividad de la herramienta tributaria.
"El Cair nos llevó a revisar y mejorar los procesos de fiscalización y llevó a las empresas a declarar mejor sus rentas", manifiesta la directora general de ingresos, Gisela Porras.
Resultados
El tributarista Froilán Becerra coincide con Porras en esto y reconoce algunas de las bondades del sistema.
Muchos de los contribuyentes que tuvieron una renta neta gravable con una rentabilidad menor de 4.67% pagaron el Cair en 2006 por no enfrentar las consecuencias del trámite para la no aplicación del cálculo, es decir, por cautela, o porque sintieron temor ante la obligatoriedad de poner en evidencia detalles de sus operaciones contables o simplemente por desconocer cómo sería la revisión de parte de la DGI. "El cierre del período fiscal pasado nos dejó una experiencia que nos fortaleció a todos y nos ha capacitado para preparar mejor la solicitud de no aplicación de Cair este año", afirma Becerra, para quien los contribuyentes tienen ahora mayor oportunidad de utilizar las alternativas del sistema y de conseguir ahorros fiscales o de reducir el impacto del impuesto sobre la renta.

