El ministro de Energía de Arabia Saudita, Khalid al-Falih, dijo ayer que los países deben cooperar para mantener las rutas marítimas abiertas para el petróleo y otros combustibles con el objetivo de garantizar los suministros, luego de los ataques a dos petroleros ocurridos la semana pasada en Oriente Medio.
Si bien no detalló pasos concretos tras los ataques que dañaron a los petroleros el 13 de junio, Falih dijo que el reino hará todo lo necesario para garantizar el paso seguro de los suministros de energía de Arabia Saudita y sus aliados en la región.
“Protegeremos nuestra propia infraestructura, nuestros propios territorios y lo haremos a pesar de los intentos de atacar algunas de nuestras instalaciones”, dijo Falih a periodistas en Tokio. “Pero las rutas marítimas del comercio global también deben ser protegidas colectivamente por otras potencias. Creemos que eso está sucediendo, pero debemos asegurarnos de que el resto del mundo preste atención”, agregó el ministro.
