CARACAS, Venezuela (DPA). Los ministros del área económica presentaron ayer las líneas generales de un nuevo ajuste de la economía venezolana para enfrentar el déficit fiscal, que requerirá financiamiento por alrededor de 8,000 millones de dólares.
El plan llamado Propuesta para el consenso incluye un aumento de la tasa del impuesto al valor agregado del 14.5% al 15.5% y llevar el impuesto a los retiros bancarios del 0.7% al 1.0%.
Los primeros anuncios prevén que las exenciones del IVA serán eliminadas en un lapso de 18 meses, la eliminación de la gasolina de bajo octanaje y la presentación de un programa de concesiones para que algunos servicios e instalaciones de infraestuctura sean administrados por compañías privadas.
El ministro de Finanzas, Tobías Nóbrega, señaló que este año la economía venezolana no crecerá, por lo que hizo un llamado a la comprensión y a la sensatez para lograr los mejores resultados.
Explicó que entre este año y el próximo se requerirá un financiamiento del 8.8% del Producto Interno Bruto (PIB), repartido en un 6.1% para amortizar las deudas externa e interna y un 2.7% debido al déficit fiscal.
Indicó que el déficit fiscal se espera cubrir con las nuevas tasas impositivas y el incremento de la recaudación interna, pero además buscando el apoyo de los mercados internacionales.
Nóbrega llamó al Congreso a buscar consenso para aprobar las reformas que ayuden atender el déficit y pidió no jugar a la crisis política propiciando la crisis económica.
La economía venezolana retrocedió un 4.2% en el primer trimestre del año y la caída podría agudizarse en los siguientes tres meses debido a la inestabilidad política tras el fallido golpe de Estado del 11 de abril.
Nóbrega dijo que el plan no es ni draconiano ni recesivo, sino que busca el camino del centro, con el consenso político.
Las autoridades informaron que también se prevén un conjunto de medidas para reducir el impacto social del plan, con atención a las áreas de educación y salud.
El ministro de Planificación, Felipe Pérez, señaló que el país atraviesa una situación difícil, pero sostuvo que en materia cambiaria el esquema de flotación del dólar puesto en práctica en febrero corrigió la sobrevaluación que tenía la moneda nacional.
No debemos usar este programa para pasar factura política. Necesitamos producir un consenso que nos ayude a superar las dificultades, dijo.
El Gabinete económico puntualizó que a pesar de que los precios del petróleo han mejorado y están por encima de los 20 dólares el barril, la economía venezolana requiere aumentar la producción del área no petrolera para generar empleos. El Gobierno venezolano admitió que la economía local no crecerá este año, pese a que a finales del 2001 esperaba un alza en torno al 3% del Producto Interno Bruto (PIB) al cierre del 2002.
Nóbrega recordó que la economía venezolana se contrajo 4.2% en el primer trimestre de este año, en relación al mismo período del 2001, tras una caída del 30% (unos 1,700 millones de dólares) de sus ingresos petroleros, principal riqueza del país, en ese lapso. Nóbrega también advirtió que el segundo trimestre de este año obtendrán tendrán resultados negativos en la economía local, agravada por la crisis política que derivó en un efímero golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez el 12 de abril pasado.
