WASHINGTON, Estados Unidos (BLOOMBERG). A instancias de Estados Unidos, el Banco Mundial (BM) está revisando contratos e inversiones anuales por 64 mil millones relacionados con sus préstamos a países desde Argelia hasta Zambia, con el fin de asegurarse de que el dinero no llegue a manos de terroristas. La revisión, que es la primera de su tipo efectuada por el mayor prestamista al mundo en desarrollo, es una extensión de la campaña que el banco inició hace un año para combatir el lavado de dinero. Se la modificó para incluir el financiamiento terrorista tras los atentados perpetrados contra el World Trade Center.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos está encabezando la campaña, la cual forma parte de la amplia investigación que el Gobierno del presidente George W. Bush lleva a cabo para tratar de ahogar el financiamiento a grupos como la red Al Qaida de Osama bin Laden.
Estados Unidos y otros 147 países han congelado activos por 80 millones desde el 11 de septiembre.
El BM, que dice que sus préstamos por 17 mil millones generan contratos por 50 mil millones para 40 mil firmas privadas cada año, envió una carta a más de 100 gobiernos que le toman prestado. El banco les pidió que se aseguraran de que esos fondos no fueran a caer en manos de terroristas o sus agentes. Dichos contratos van desde 297 mil para Texel Corp. de Japón para que proporcione 78 computadoras Dell para un proyecto en Sri Lanka, hasta 9.1 millones para una firma argentina de construcción, Vialco S.A., para que repare y mantenga las carreteras del país.
El banco también dijo que está revisando las compañías privadas que recibieron préstamos, garantías o inversiones patrimoniales por 14 mil millones de International Finance Corp., la división del Banco Mundial que le presta a compañías privadas. Próximamente, la International Finance Corp. contactará a bancos y otras instituciones financieras en las que ha invertido, para asegurarse de que conozcan a su cliente.