El brote del ácaro spinky en las plantaciones de arroz de la provincia de Chiriquí ha generado tensión en el sector productor del país.
Los agricultores revelaron ayer que un 30% de las plantaciones están afectadas por la plaga, considerada una de las más dañinas en el mundo, al tener la peculiaridad de multiplicarse muy rápido en las plantaciones y, por ende, afectar los rendimientos por hectáreas.
Las autoridades agropecuarias aseguran que el brote reapareció porque los productores utilizan semillas contaminadas y, en algunos casos, de dudosa procedencia.
Tal acusación alteró a los productores quienes advierten de que el spinky se apoderó de la siembra por las variaciones climáticas.
Oscar Osorio, ministro del Ministerio de Desarrollo Agropecuario (Mida), afirmó que “de las 23 variedades de semillas de arroz que se siembran en Chiriquí, solo tres no están contaminadas con el ácaro”.
Los productores han cometido varios errores. Algunos siembran una semilla conocida como “cubana” que está infectada y se desconoce cómo la introducen al país, explicó Osorio.
Las únicas variedades, según el funcionario, que no están contaminadas con el ácaro spinky son las producidas por el Instituto de Investigación Agropecuaria de Panamá (Idiap).
Los agricultores sostienen que las causas del brote se originan en las variaciones climáticas y por el exceso de humedad. “Ningún productor siembra para arriesgar su inversión con semillas de baja calidad”, dijo Alexander Araúz, miembro de la Asociación de Productores de Arroz de Chiriquí (Apach).
Araúz precisó que el 70% de las semillas de arroz empleadas por los productores se produce en el Idiap.
Las plantas afectadas por el ácaro presentan granos vanos, parcialmente llenos y manchados, curvatura anormal del pedúnculo de las panículas y necrosis en el interior de las vainas.
En condiciones óptimas, una espiga de arroz tiene 150 granos y cuando la planta está afectada por el ácaro, solo produce 95, explica Araúz.
El problema radica en que el presupuesto asignado para investigaciones agropecuarias en el Idiap es muy bajo, indicó el representante de Apach.
En la provincia de Chiriquí se cultivan 22 mil hectáreas de arroz y en noviembre tienen programado sembrar 2 mil hectáreas más bajo riego.
La aparición del spinky representa un duro golpe para el sector productor, que se trata de abrir espacio en un mercado en el que abundan las importaciones.
Justamente ayer, miembros de la Asociación Nacional de Molineros (Analmo) se reunieron con el ministro del Mida y directivos del Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) para negociar la compra de la producción local de arroz.
Los molineros se comprometen a adquirir toda la cosecha si el IMA les compra el grano pilado, comentó Julio Ábrego, director del IMA.
Sin embargo, cuando el último brote de spinky entre 2003 y 2004 afectó el 90% de la producción, habría que ver qué tanto provecho se le podría sacar al reciente acuerdo.
El consumidor, por su parte, se enfrentaría a una posible merma que traería especulación en los precios y probables alzas.
Siembra en cifras
8.8
Millones de quintales de arroz se consumen por año en el país.
154 lb
Es el consumo per cápita.
60%
Del arroz que se cultiva en el país proviene de la provincia de Chiriquí.