El aún director general de la FAO, Jacques Diouf, descubrió ayer una placa conmemorativa para celebrar la erradicación a nivel mundial de la peste bovina, una de las enfermedades del ganado más mortíferas de la historia y desde siempre una amenaza a los medios de subsistencia.
La erradicación de la peste bovina a nivel mundial, alcanzada a través de un programa coordinado por la FAO, hace que este virus se convierta en la primera enfermedad animal eliminada en su medio natural gracias al esfuerzo humano y la cooperación internacional, y la segunda enfermedad de cualquier tipo en ser erradicada, tras la viruela en los humanos. Así lo aseguró ayer en una nota la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
“Durante años he dicho con frecuencia que el mundo tiene los medios necesarios para eliminar el hambre, la malnutrición y la pobreza extrema”, subrayó Diouf.
“La erradicación total de la peste bovina –añadió–, una enfermedad que diezmaba al ganado vacuno, a los búfalos y a muchas otras especies animales, tanto domésticas como silvestres, es hoy una prueba de ello”.