MUNICH, Alemania (DPA). En el mayor escándalo del segmento bursátil Nuevo Mercado alemán, comenzó ayer en Múnich el proceso contra el jefe de la empresa ComROAD, acusado de haber inventado cifras astronómicas de ventas para impresionar a los accionistas y hacer ganancias millonarias.
Bodo Schnabel, de 51 años, fundador de ComROAD, supuestamente empresa de equipamiento de automóviles con sistemas de alta tecnología, comparece acusado de estafa con acciones, manipulación con información privilegiada y estafa comercial.
Según la acusación, Schnabel inventó gran parte de la cifra de ventas de la firma para hacer subir la cotización de sus acciones y con ello se hizo con una suma millonaria mediante la reventa de sus propias acciones.
Víctimas fueron muchos inversores que compraron los papeles a precios elevados artificialmente para hallarse después ante acciones sin valor alguno.
Mientras Schnabel ha negado todos los puntos de la acusación, su esposa, también miembro del directorio de ComROAD, presentó hoy ante el tribunal una amplia confesión, en la que reconoce su ayuda a los delitos, aunque lamenta no haberse opuesto a haber sido instrumentalizada por su marido.
Schnabel afirmó en el 2001 que ComROAD había recibido un contrato de 93 millones de euros de una firma de Hong Kong, VT Electronics Limited, que resultó ser inexistente. Con esta maniobra y sucesivas declaraciones a partir de noviembre de 1999, cuando la firma salió a la bolsa, el acusado hizo subir diez veces el valor bursátil original de sus acciones, de 15.50 euros.
El Nuevo Mercado, creado por empresas de la nueva economía en que miles de inversores han perdido fortunas desde 2000, deberá ser cerrado el próximo año.