Según el embajador de la Federación de Rusia en Panamá, Oleg Ostrovskiy, "el tratado beneficia económicamente sobre todo a Panamá, cuyos barcos frecuentan los puertos rusos, muy pocas veces reciprocados por visitas de las naves de pabellón ruso a los puertos panameños".
El convenio entre los dos gobiernos fue aprobado en la Asamblea Legislativa de Panamá el 7 de julio del 2004, firmado en Moscú, el 29 de julio del 2003 y promulgado en la Gaceta Oficial el 15 de julio del 2004.
Las partes prestarán todo tipo de cooperación en la libertad de la navegación comercial y se abstendrán de cualesquiera acciones que puedan afectar el desarrollo normal de la navegación marítima.
Igualmente acuerdan las partes, dentro de los límites de sus legislaciones nacionales, que continuarán realizando esfuerzos para mantener, desarrollar la colaboración permanente y eficaz entre sus órganos componentes.
En particular, las partes acuerdan efectuar las consultas recíprocas y el intercambio de información entre sus órganos competentes, así como estimular el fomento de contactos entre las respectivas organizaciones y empresas de navegación.
Rusia y Panamá también concederán a las naves de la contraparte que participan en el tráfico marítimo internacional el trato de nación más favorecida respecto al acceso libre a los puertos, uso de los puertos para carga y descarga de mercancías, para el embarque y desembarque de pasajeros, pago de cargos portuarios, ejercicio de transacciones comerciales normales y prestación de servicios destinados a la navegación.
Si una nave de una de las partes naufragara, encallara o sufriera otro accidente a lo largo de la costa del Estado de la otra parte, la nave y su carga gozarán en el territorio de este Estado de los mismos beneficios que se otorgan a la nave nacional y a su carga.
La tripulación, pasajeros, la propia nave y su carga, recibirán, a cualquier hora, la misma asistencia y cooperación que se concede a la nave nacional.
Agrega el acuerdo que la carga y los artículos descargados o salvados de la nave, siempre que no sean entregados para uso o consumo en el territorio del Estado de la otra parte, no estarán sujetos al pago de los derechos aduaneros.
En ese orden, el embajador ruso manifestó que "la parte rusa se siente muy satisfecha por los beneficios que está recibiendo el amigo país Panamá, con quien estrechamos los lazos de cooperación en diferentes esferas. El Convenio Marítimo, por lo tanto, crea el ambiente favorable para nuestras relaciones bilaterales"
