Restaurantes, hoteles y supermercados del Caribe están recibiendo productos industrializados, frutas y legumbres que se producen en los campos panameños.
La visión de empresas locales que se han trazado una estrategia para buscar nuevos mercados de exportación las ha llevado lejos.
Conservas Panameñas Selectas S.A , a través de sus marca Del Prado, hace cuatro años inició su incursión al Caribe con sus jugos y néctares. Primero comenzó con Curazao, Aruba y San Andrés en Colombia, y ante el potencial y el buen desempeño obtenido optó por seguir ampliando la lista de países en el Caribe, como Granada, Cuba, Bonaire, Trinidad y Tobago y San Martín.
El gerente de ventas internacionales, Eric Dormoi, proyecta que este mercado seguirá creciendo. En estos países sus ventas han crecido cerca de un 40% por encima del año anterior, lo cual anotan como un logro, debido que tienen que competir con otras marcas foráneas.
La estrategia elaborada con los distribuidores de cada país ha dado sus resultados, comentó.
Mientras la línea Del Prado mantiene el pie en el acelerador por buscar nuevos mercados, hay otras compañías que también buscan sacarle provecho a esos mercados.
Comagro S.A., empresa panameña con dos años de haberse constituido, lleva nueve meses colocando frutas en las islas de Guadalupe, San Martín y Martinica. A estos destinos hacen llegar piña, naranja, limón, tomate y pimentones, entre otros.
Mary Ann Castro, al mando de Comagro S.A, precisó que la demanda de mercancía en el Caribe está en crecimiento, al punto que se suplen con importaciones de Colombia, Centroamérica y México, productos que posteriormente reexporta.
Semanalmente Comagro exporta entre uno y dos contenedores; al tiempo que tratan de colocar productos en Barbados y añadir a su portafolio fresas, miel de abeja y limón.
Ricardo Barnett, de la Agencia de Promoción de Inversiones y Exportaciones del Ministerio de Comercio, indicó que actualmente procuran enlazar a los exportadores con compradores potenciales para cerrar nuevos negocios. Autoridades y empresarios reconocen el potencial del Caribe, zona que presenta una singular diversidad en las preferencias de los consumidores por el tránsito de turistas.
