Las asociaciones de consumidores y los profesionales del sector turístico criticaron la publicación ayer de la lista negra de compañías prohibidas en Francia por su carácter parcial que no ofrece una imagen global y clara para el pasajero.
Las asociaciones de familiares de víctimas de accidentes, en particular, denunciaron que esa lista no incluye ninguna de las compañías cuyos aviones han sufrido en los últimos tiempos accidentes y sobre los que se han emitido dudas sobre su fiabilidad.
En ese sentido, Marc Chernet, presidente de la asociación de familias de las víctimas del siniestro de un avión egipcio que se estrelló en Sharm El Sheij en enero de 2004, sobre todo con turistas franceses, consideró que "este anuncio tiende a engañar a la opinión pública porque" la lista francesa no incluirá a compañías de países con los que Francia tiene acuerdos bilaterales.
La lista divulgada por la Dirección General de la Aviación Civil de Francia (DGAC) incluye las cinco compañías que tienen prohibido operar en Francia.
Se trata de la norcoreana Air Koryo, la estadounidense Air Saint Thomas, la liberiana International Air Services, la mozambiqueña Lineas Aer de Mozambique (LAM) y la tailandesa Phuket Airlines, a la que se añade Transairways de la que LAM había fletado aviones.
El director de mercadotecnia del tour-operador Fram, Serge Laurens, precisó que los problemas sobre la seguridad se plantean sobre todo con las compañías extranjeras en vuelos interiores, que nunca aparecerán en esa lista, más que con las que son auditadas por la DGAC.
En esa misma línea, el presidente de Afat-Voyages, Pierre Mas, consideró que el carácter exclusivamente francés de la lista negra corre el riesgo de "perturbar un poco más la visibilidad de la seguridad aérea". El comisario europeo de Transportes, Jacques Barrot, quien pretende sacar adelante una lista negra europea, explicó en declaraciones a la emisora France Info que un control de la seguridad aérea por cada Estado miembro no es una situación conveniente.
"No es posible saber si una compañía está prohibida en un país y no en otro", indicó Barrot.
El responsable de seguridad de la DGAC, Maxime Coffin, defendió la publicación de una lista negra francesa para impulsar la elaboración de una lista a escala europea, algo que a su juicio plantea el problema de la armonización de los procedimientos de control.

