Los contratos del Petróleo Intermedio de Texas para septiembre cerraron la sesión regular con un precio de 46 dólares con cinco centésimos, después de restar 53 centésimos al máximo histórico a que cerró el viernes.
Los contratos de Petróleo Brent para entrega en septiembre terminaron la sesión a 43,67 dólares en Londres, 21 centésimos por debajo del valor registrado en la sesión anterior.
El valor de los contratos de gasolina para entrega en septiembre quedó en un dólar con 30 centésimos por galón (3,7) litros, después de un descenso de alrededor de 4 centésimos, y los contratos de gasóleo finalizaron a un dólar con 20 centésimos el galón, tras perder un centésimo respecto del viernes.
Los primeros resultados oficiales en Venezuela indicaron un triunfo del presidente Hugo Chávez en el referéndum en que la oposición reclamaba su revocación, lo que contribuyó a rebajar la presión alcista sobre los precios del crudo.
La Organización de Estados Americanos (OEA) y el Centro Carter, que han actuado como observadores del proceso, avalaron el resultado, a pesar de las reticencias que ha expresado la oposición.
El ex presidente de EU Jimmy Carter indicó que "es clara" la diferencia a favor de Chávez, y el secretario general de la OEA, el colombiano César Gaviria, afirmó que "es muy difícil manipular el resultado final", aunque se mostraron dispuestos a analizar las alegaciones de la oposición.
El triunfo de Chávez ha disminuido algo la inquietud de los mercados sobre posibles alteraciones en los envíos de crudo desde el país latinoamericano, pero no ha logrado evitar que los precios, tanto en Nueva York como en Londres, sigan muy cerca de los máximos.
La cautela inversora y la volatilidad siguen presentes en los mercados y llevó al crudo tejano a cotizar hasta en 46,91 dólares el barril durante la pre apertura y a un máximo de 44,11 dólares por barril durante la sesión londinense.
La violencia en Irak también mantiene en vilo a los mercados, junto a las dudas sobre la capacidad de Rusia para continuar con su ritmo exportador tras la crisis de la empresa petrolera Yukos.
El mercado neoyorquino reaccionó de inmediato al alza después del incendio de uno de los numerosos pozos de Irak.

