Un proyecto de ley que busca unificar los colores utilizados para identificar los dispensadores de combustibles en las estaciones se promueve en la Asamblea Nacional, mientras algunas empresas concesionarias del mercado de hidrocarburos no consideran urgente esta reglamentación.
El proyecto de ley 89 que uniforma colores permanentes en las etiquetas de las bombas surtidoras de los derivados del petróleo fue aprobado en primer debate y está en el orden para segundo debate.
La propuesta de la diputada del Partido Revolucionario Democrático Rosa Canto —que se gestiona desde el 25 de septiembre de 2014— busca evitar errores en el despacho de combustibles en las estaciones y que afectarían al consumidor.
La iniciativa, discutida en primer debate en la Comisión de Comercio y Asuntos Económicos de la Asamblea, establece el color verde para identificar la gasolina de 95 octanos; el color rojo para la gasolina de 91 octanos y el amarillo para identificar el diésel.
Según la proponente del proyecto, el problema se origina porque en algunas estaciones de servicio de combustible no tienen debidamente identificados los diferentes combustibles que se despachan.
Esta situación ha llevado a serias afectaciones a vehículos debido a la confusión humana, por no tener una uniformidad en las etiquetas en las que se plasma el nombre o tipo de combustible.
Incluso los trabajadores de las gasolineras se muestran de acuerdo con el proyecto de ley, toda vez que en diversas ocasiones han cometido errores y les ha tocado responsabilizarse por la reparación del vehículo.
“Con este proyecto de ley, la ciudadanía tendrá la facilidad de ver los mismos colores de combustible en todas las estaciones que dispensan dicho producto en el territorio nacional”, subrayó Canto.
Sin embargo, algunos representantes de las marcas que están en el mercado no consideran urgente la aprobación de esta regulación.
“Es algo absurdo e ilógico cuando hay otros temas más importantes en el acontecer nacional”, dijo una fuente.
Señalo que los colores que tiene cada dispensador en las gasolineras es un distintivo de mercadeo de marca de cada distribuidora, así como de seguridad que ya manejan bien tanto trabajadores de las estaciones como consumidores.
De acuerdo con los registros, son pocos los casos de errores en el despacho de un combustible por confusión en el color del dispensador y generalmente lo que ocurre es que los mismos conductores que utilizan un automóvil que no es de su propiedad desconocen si el vehículo usa gasolina o diésel. El proyecto de ley no incluye el color que se utilizaría para los dispensadores de gas, otro de los combustibles que se vende en algunas estaciones.
Además, unificar los colores representaría costos para las distribuidoras, desde pintar pistolas, surtidores y tapa de tanques, entre otros, cambios que tendrían que hacer en sus instalaciones.
Por otro lado, los últimos informes de la Secretaría Nacional de Energía proyectan para el próximo viernes una nueva baja en los precios de los derivados del petróleo.
El galón de gasolina de 95 octanos y el diesel bajarían 8 centésimos, mientras que la gasolina de 91 octanos se reduciría en 3 centésimos.