Es oficial: el gas natural que fluye de las formaciones de esquisto de Estados Unidos ahora está disponible para el mundo.
El miércoles, el buque cisterna de gas natural licuado Asia Vision salió de Sabine Pass, la terminal de exportación de Cheniere Energy Inc. en Luisiana, con el primer cargamento de gas de esquisto de Estados Unidos, según Sabine Pilots, el grupo que ayuda a los barcos a atravesar la vía fluvial de la región. El destino del buque, que transporta 84.95 millones de metros cúbicos, es Brasil.
La primera exportación de Estados Unidos no podría haber llegado en un peor momento para los proveedores de gas del país. Los precios bajos del crudo están afectando el mercado global de GNL, en tanto los contratos para el combustible suelen estar atados al petróleo.
Un exceso de oferta también está surgiendo en tanto otros países, como Australia, aumentan la capacidad exportadora mientras desacelera el crecimiento de la demanda en otros lugares.
El superávit mundial amenaza con mantener la oferta de Estados Unidos en alza y los precios del gas doméstico por debajo de $2 por millón de BTU.
“Las realidades bajistas de este mercado son tan grandes que esto es como aullarle a la luna y esperar que se mueva”, dijo Jason Schenker, presidente de Prestige Economics LLC en Austin, Texas. “No habrá una gran reacción”.
La terminal de Sabine Pass es una prueba del espectacular cambio ocurrido en el mercado estadounidense de gas natural durante los últimos 10 años.
Comenzó como un complejo de importaciones y se transformó en un sitio de exportaciones después que la fractura hidráulica y la perforación horizontal comenzasen a extraer de las formaciones de esquisto más gas que lo que EU podía quemar por cuenta propia.
