El Gobierno español anunció ayer una prórroga de seis meses en la ayuda pública a los desempleados de la larga duración que ya no tienen derecho a cobrar el subsidio, una medida que beneficiará a unas 200 mil personas.
El presidente José Luis Rodríguez Zapatero hizo el anuncio durante un discurso ante diputados, senadores y cargos electos socialistas en la apertura del curso parlamentario tras el receso de enero.
Según el Ejecutivo, la medida tendrá un coste para las arcas públicas de unos 510 millones de euros (700 millones de dólares).
La normativa, que será ratificada el próximo viernes, permitirá cobrar un cheque mensual de 426 euros (585 dólares) durante los próximos seis meses a todos los ciudadanos que hayan agotado su prestación por desempleo recientemente.
El subsidio prorroga el aprobado a mediados del año pasado, y que durante este tiempo ha beneficiado a casi 300 mil desempleados. No obstante, Zapatero precisó que estas personas no recibirán una nueva ayuda y que el desembolso añadido irá a parar a otras 200 mil personas que se acaban de quedar sin la prestación ordinaria.
“Merece la pena hacer ese esfuerzo social”, dijo Zapatero.
“Y merece la pena que digamos que en la medida de nuestras posibilidades, los ciudadanos que han perdido su empleo o que han perdido su prestación van a tener, hasta donde podamos, al Gobierno y a los poderes públicos de su lado”, indicó.
