La nueva línea ferroviaria de alta velocidad fue inaugurada hoy, domingo, y casi a la vez que el convoy oficial en el que viajaban las autoridades, partió de la estación de Hamburgo el primer tren de pasajeros que utilizó la vía.
Pero, contrariamente a la comitiva oficial, que llegó a Berlín con dos minutos de adelanto, tras recorrer en 88 minutos los 287 kilómetros que separan a las dos ciudades, los pasajeros del primer enlace regular tuvieron que bajarse en la estación de Ludwiglust y llegaron a su destino con 67 minutos de retraso. Una portavoz de los ferrocarriles alemanes, Deutsche Bahn, confirmó el incidente e informó que se había debido a fallos en la red de alta tensión que alimenta la línea. La Deutsche Bahn ha invertido 859 millones de dólares y cuatro años de trabajo en la nueva línea de alta velocidad, gracias a la cual los trenes pueden alcanzar 230 kilómetros por hora.
