A pesar del crecimiento económico impresionante de los últimos años, Filipinas sigue estando entre los países más pobres del sureste de Asia, como lo muestran los hallazgos recientes de dos agencias acreditadas, una extranjera y otra local.
En este informe, titulado Una perspectiva para los mercados asiáticos emergentes clave, publicado este mes, la Unidad de Inteligencia Economista (UIE) dice que la brecha entre ricos y pobres ha seguido ampliándose. La UIE es la división de análisis e investigación de The Economist Group que incluye al periódico The Economist asentado en Londres, con afiliados en el mundo.
La UIE dijo que para 2019, “Filipinas seguirá siendo una de las economías más pobres del sureste asiático, con un nivel menor del PIB (producto interno bruto) per cápita que la mayoría de las otras economías importantes de la región”.
A pesar del crecimiento robusto y el ingreso per cápita promedio en aumento, los filipinos pobres quedarán atrás y no sentirán las ganancias de una economía en rápida expansión, indicó la UIE.
“La economía de Filipinas también quedará marcada por las amplias iniquidades de ingresos y la disparidad entre los hogares más ricos y los más pobres seguirá aguda en particular.
Consecuentemente, grandes cantidades de Filipinos continuarán viviendo en pobreza”, señala el informe.

