Las 500 mayores fortunas profesionales francesas han perdido un 25% de su valor patrimonial en el último año, según la clasificación que ayer hizo pública la revista Challenges.
La caída del patrimonio de los ricos en un año ha sido mayor que la del conjunto de la población (-10%), debido a que los primeros invierten un mayor porcentaje de su fortuna en activos con riesgo, en particular en acciones, destacó Challenges.
En todo caso, el retroceso de las mayores fortunas del país fue inferior al del índice CAC-40 de la Bolsa de París, que en 2008 sufrió un descalabro del 40%.
En el podio de los más ricos siguen un año más los mismos y en el mismo orden: primero, Gérard Mulliez, propietario del grupo de distribución Auchan, con 15 mil millones de euros (20 mil 775 millones de dólares); seguido del presidente del grupo de lujo LVMH, Bernard Arnault, con 14 mil 583 millones de euros (20 mil 198 millones de dólares), y de la accionista de referencia de LOréal, Liliane Bettencourt, con 10 mil 74 millones de euros (19 mil 493 millones de dólares).
Les siguen Bertrand Puech y la familia Herms (10 mil 631 millones de dólares), que ha subido dos puestos en un año gracias a haber mantenido estable su patrimonio.
En quinta posición se sitúa la familia de armadores Louis Dreyfus, con 9 mil 695 millones de dólares; en sexta el patrón de la compañía de distribución PPR, Franois Pinault, con 6 mil 858 millones de dólares; seguido muy de cerca por Serge Dassault, “número uno” del fabricante aeronáutico que lleva su nombre.
Completan la lista de los 10 más ricos: Romain Zaleski (Eramet), Jacques Servier (laboratorios Servier) y Alain Wertheimer (Chanel).
