A pesar de ser un mercado regulado desde septiembre de 2008 —cuando se establecieron precios máximos de venta— y de estar constantemente fiscalizadas por las autoridades, se siguen registrando irregularidades en las gasolineras, las cuales pueden afectar a los compradores de combustibles.
Recientemente, el subjefe del Departamento de Metrología de la Acodeco, Rigoberto De la Rosa, dijo que de 119 estaciones de la provincia de Panamá—que se verificaron del 16 de enero al 23 de febrero pasado— un total de 26 no cumplían con los procedimientos y parámetros en materia de reglamentaciones técnicas.
El funcionario detalló que encontraron surtidores desajustados y sellos rotos, que son los engranajes que calibran cada una de las mangueras para abastecer al cliente. Con este desajuste, el consumidor recibe menos combustible al momento de su compra.
Cuando se encuentran este tipo de anomalías, las autoridades piden que se cierre el surtidor hasta que se corrija el problema. La idea es lograr que tenga los niveles de tolerancia permitidos.
No obstante, los inspectores giran citaciones para que los concesionarios acudan a la instancia pertinente a presentar sus descargos.
De encontrarse una evidente falta por parte del agente económico, pueden ser sancionados con multas que podrían llegar hasta los $25 mil, aunque los comerciantes tienen el derecho de apelar cualquier decisión que se tome.
Los surtidores, como cualquier aparato mecánico, pueden descalibrarse, pero es responsabilidad de cada estación ejecutar constantemente los ajustes necesarios.
Los sellos, en tanto, se colocan para mantener una adecuada calibración, y cuando se rompen es por error humano o incluso a propósito.
Un total de 301 estaciones de combustible —de 993 que se verificaron entre enero y febrero pasado —confrontaron algún problema con los certificados de calibración, con los lubricantes, con los tableros de precios, con la denominación del combustible y con el sello de los surtidores, entre otros motivos, revelan datos estadísticos de la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco).
El reporte también específica que en el primer bimestre del año se verificaron 2 mil 153 tanques de combustible en las estaciones, hallándose incumplimientos en las normas técnicas en 13 de ellos.
Por otro lado, informes extraoficiales apuntan a que esta semana la gasolina de 95 octanos y el diésel podrían bajar entre tres y cuatro centésimos el galón, lo que provocaría un segundo descenso de estos dos productos de manera consecutiva.
En tanto que la gasolina de 91 octanos estaría manteniendo su precio o tener una leve alza de un centésimo el galón, de acuerdo con las primeras tendencias en los precios de paridad de los productos derivados del petróleo.
En las últimas semanas, los precios de los combustibles en el mercado local han mantenido una tendencia bajista, como consecuencia de la caída que ha registrado el barril de crudo a raíz de que persiste una sobreoferta mundial y de que Estados Unidos ha incrementado su producción, especialmente de esquisto.
Este panorama mantiene inquietos a los inversionistas de esta industria, que observan que la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de reducir su cuota, no está dando los resultados esperados de apuntalar los precios.
